En Cabarete, se queda todavía un lugar sin que la mano humano hizo daño y ese lugar se llama la Boca de Cabarete. Mucha gente cansada de la playa de Cabarete que los constructores están destruyendo poco a poco aliñando edificios y paredes de concretos en los 60 metros se van por la Boca donde se encuentra el rió de Yassica que se tira en el mar. Allá se encuentra un área totalmente natural, sin construcción a parte de 2 restaurantes típicos construid
os en madera donde se come pescados fritos y camarones en una total tranquilidad.
Una pista de arena llega hasta la Boca desde Jardín Deportivo o Camino del Sol. Es el único acceso a la Boca donde se reúnen turistas y dominicanos en un buen ambiente. También se practica kitesurfing and windsurfing en el rió.
Últimamente, apareció un inversionista con supuestamente millones para un proyecto privado en ese lugar. Sin preguntar a nadie, conjunto con el famoso Canoa, cerraron el acceso a la boca. Alertados de esa violación,, los ministerios de turismo y medio ambiente reabrieron el acceso el mismo día. En Cabarete, es la costumbre del ayuntamiento vender los accesos públicos a la playa quitando el derecho de la gente de disfrutar la playa. En la mapa del decreto 847-09, se ve escrito y marcado el camino hasta la Boca.
El consultor del dueño del proyecto, un ciudadano canadiense se acerco a la junta de vecinos de Islabón, la cual es dirigida por un testaferro de Canoa, para promocionar ese proyecto. Ese consultor canadiense esta prometiendo muchos empleos a los habitantes de Islabón y Vera Larga, si ayudan a satisfacer la condición del inversionista de eliminar los restaurantes ubicados en los 60 metros del río para apropiarse la boca. El consultor dijo en la reunión que el inversionista no tiene ninguna obligación legal de dejar acceso publico a la boca (que no es cierto), pero que él está dispuesto a crear otro acceso al río de donde la gente pueden caminar por el lado del río hasta la boca donde no encontrarán ningún restaurante para servir al público. Es evidente que el propósito del plan es eliminar La Boca como un atractivo turístico y un lugar de diversión para los residentes de Cabarete y convertirla en un paraíso privado.
El proyecto de Playa Grande ha sido elogiado como un proyecto modelo donde los inversionistas privados acomodaron los objetivos de la inversión privada con los intereses públicos . Negociaron con los dueños de restaurantes existentes, construyeron kioscos donde sirven comida y refrescos para los bañistas. y aseguraron que el publico tendría acceso igual o mejor que antes. Aunque el inversionista planeando privatizar La Boca no pretende seguir el ejemplo de los de Playa Grande, esperamos que las autoridades de los Ministros de Turismo y Medio Ambiente sean firme en sus responsabilidades de proteger el interés del público.
